domingo, 21 de diciembre de 2008

Lo que pasa cuando no pasa nada

Aterrizo tarde al capítulo de presentaciones, lo sé, pero no pasa nada. Fue en esa comida inaugural de principio de curso, en una taberna de cocina mestiza, cuando, entre anchoa y anchoa, antes de pasar a la mesa, y antes de saludar a una antigua alumna que por allí se encontraba, el señor Arco tensó su ídem y disparó el tema del blog. Y entre risas nos acordamos del de Miravete de la Sierra, el pueblo en el que nunca pasa nada. Tampoco.

Y así quedó. Será el estoicismo de algún gen andalusí, el temple aragonés, la tradición cristiana del “no molestar”. Será que alguna paradoja se nos habrá pegado de las filosofías orientales. Será que nos hemos incubado homeopáticamente el germen de la adversidad para hacerle frente. Será que quitamos importancia. Que somos invisibles. O que no queremos ver. La cuestión es que, pase lo que pase, Nada pasa. (Y si pasa, se la saluda).

Y con el blog bautizado recordé después alguna de esas perlas de las primeras clases de los cursos de iniciación. Fue hace unos años.
- “¿Qué palabras conocéis en español?”- pregunté, siguiendo el guión habitual. Y los alumnos fueron respondiendo: … Hola … Yo … Hotel … Teléfono … Mi … Casa … Comida … Amigo … Y llegué al chino del rincón: …Nopasanada… -dijo con una amplia sonrisa de felicidad, sabiendo que aportaba un grado más a la cadena.

Desde entonces, y ya antes, me doy cuenta de que recurrimos al no-pasa-nada con frecuencia inusual, una frase hecha que se suele emplear con independencia de si no pasa o de si sí que pasa. Sirve tanto para alumnos fuera de nivel, fuera de plazo, fuera de sí... como para asuntos internos. Dicho así, de entrada, no soluciona nada, pero calma los ánimos. Tranquiliza. Ayuda a no desesperar.

Respecto a las intenciones, ya se verán, y en cuanto a las conmemoraciones, creo que no es precisamente nostalgia lo que nos mueve. Como dijo un poeta: Cualquier tiempo pasado fue... anterior.

1 comentario:

  1. ¡Bravo por la narración de la gáenesis del blog! Así ocurrió, doy fe. No se podría contar de mejor manera.
    Respecto a la disertación sobre el "No pasa nada",también aplausos: ¡genial!
    Y como dicen los franceses: "Pas de nouvelles, bonnes nouvelles". Así que mi deseo es que siga sin pasar nada...grave, porque pasar, lo que se dice pasar, sí pasa: pasa la vida misma todos los días en nuestro Departamento.

    ResponderEliminar