sábado, 5 de abril de 2014

Historias de amor (5): Antonella

http://www.gonzoo.com/starz/story/como-se-conocieron-tus-padres-1086/

Contar una historia de amor que no es tuya resulta difícil porque sólo quién la vive, con sus recuerdos, puede transmitir realmente las emociones que se sintieron en aquellos días, hoy presente. Es po eso que les he pedido que me contaran como fue, y así os la devuelvo describiendola con ojos diferentes y con la emoción de una hija.
Esta es la historia de dos jovenes que hace cuarenta años se cruzaron en el camino de sus vidas. Fue una cita a ciegas aunque ambos los sabían. Tenían un amigo en común que organizó una fiesta en su casa. La chica estaba emocionada y se puso muy guapa para que el chico se volviera loco por ella. Y fue un exito. Bailaron toda la noche y fue un flechazo. Ella, más tímida que él, se puso tan nerviosa que se desmayó entre sus fuertes brazos. Cuando abrió los ojos estaba él, con sus ojos profundos que la miraba preocupado pero con una sonrisa de felicidad porque hasta hora nuncs había sentido palpitar el corazón con ninguna mujer. Para ella en cambio era el primero amor. La verdad era que él se demostró más tímido que ella. Efectivamente no la llamó en diez días aunque ella le había dejado el número del teléfono de casa. El domingo siguiente, reunió el valor y la llamó invitándola a salir para dar un paseo cerca del mar. Y así comenzó el principio de un camino juntos gracias a aquel hallazgo. Se casaron después de tres años de noviazgo y nacieron los hijos. Esta es la historia de mis padres, nunca me cansaré de agradecerselo, por habernos dado la vida, criarnos y amarnos. Para mí son un ejemplo de pareja que con sacrificio y muchísimo amor han llegado hasta ahora amandose cada día más. A pesar de que en aquellos días, la vida se transformaba, llena de cambios y forma diferentes. No era fácil adaptarse a la velocidad con que todo sucedía, sacando la casa y los hijos adelante. Y con ese tesón ahora se viven con madurez y ganas de seguir haciendo cosas juntos, con más serenidad, si poder precindir el uno del otro.

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