miércoles, 18 de noviembre de 2009

Fin y principio: el eterno bucle

Por fin. Se acabó. Se acabó el año de celebraciones, de fastos, de veinticinco años de lucha sin cuartel, de aniversario de años pasados. Por fin. Echamos el cierre. Se acabó. Ya hemos mostrado todo de cuanto somos capaces: de lo que hicimos y de lo que hacemos; de lo que podemos hacer y de lo que hemos demostrado ser capaces de hacer. Se acabó. Y lo repito con ganas, con saña, apretando los dientes. Abajo la tiranía del pasado. Abajo tanta memoria (perdón por esto, pero creo que se debe a mi estulta, solitaria y única neurona semihábil y en activo).

El día 14 de este mes que se precipita hacia el abismo del tiempo fue el día en que se cumplieron los verdaderos 25 años de este Departamento. Lo celebramos el día anterior con los fastos que ya Gelovira os contó y que Melmoth apostilló con verbo barroco (en plena digestión). Pues ya está. Gracias a Dios (para los creyentes) y al BigBang (para los agnósticos) ya se ha acabado. "El rey ha muerto", gritaban los súbditos ante el cuerpo frío y rígido.

Desde este momento, como general en jefe de este blog, declaro una nueva etapa. He decidido pasar al final todo cuanto forma parte de nuestra memoria, de la del Departamento, de nuestros logros y de nuestros fiascos. Y he decidido que cada gato esté en su rincón o cojín, o cesta o callejón. Que cada uno tome las riendas de sus letras y de sus actos. Así, el blog será lo que cada uno haga de él. Tenemos futuro, tenemos coraje, tenemos ganas, tenemos humor, tenemos lo que hay que tener y, sobre todo, tenemos un alumnado especial y maravilloso, que no nos lee ni admira nuestros ripios, pero que nos visita y se pregunta: "¿Qué harán estos tipos con tanto tiempo libre? ¿No podrían darnos clases de conversación?"

Como dijo un día mi Ex, refiriéndose a la estrategia del equipo departamental que tan buenos frutos ha dado hasta el presente: "No somos de quedar los domingos por la mañana para hacer ballpainting en Alcalá de Moncayo ni jugamos a pistolitas láser en ratos libres para aumentar la sinergia de grupo y diseñar estrategias. Cada cual suele ir a su bola".

Pues bien, ha sonado el pistoletazo de salida: "cada uno a su bola, cada mochuelo a su olivo y cada gato a su cesto". He cambiado la estética del blog para que se vea que cambiamos de verdad. He situado los cojines al lado derecho del blog, ordenado en sendas columnas y he mimado los titulares. Espero que os guste y que no vayáis a otros cestos donde nada se os ha perdido. Os requiero fieles y entregados. Llenemos este blog de tonterías con las que disfrutemos y hagamos disfrutar a los que no nos leen. Olvidémonos de ejercicios, exámenes, pruebas unificadas, textos y cultura para los alumnos... creo que de verdad tienen más de la que jamás podrán digerir (como los mil platos que embozaron mi sistema digestivo el fatídico 13 y viernes). Hagamos lo que queramos, como queramos y cuando queramos. Como decía Rottenmeier que gritaba la desaforada Gelovira: "¡¡¡ANARQUÍA!!! ¡¡¡ANARQUÍA!!!"

Y no digáis que no os he avisado...
"¡¡¡Viva el rey!!!", es mi grito final (y ya podéis imaginar que no me refiero al "nuestro").

Miau, miau, miau, requetemiau!!!

2 comentarios:

  1. Mi enhorabuena, An Arco, por el nuevo diseño de este blog. Es claro, ordenado,estético...¿Quizás un poco oscuro? Aunque, pensándolo bien, el negro le da un toque entre moderno y elegante, muy actual.
    Y sobre todo, mi enhorabuena por haber tachado de tu larga lista de tareas esos 25 años del Departamento ¡Una cosica menos!¡Qué liberación!
    Y ahora a seguir adelante con nuevas entradas, nuevos comentarios, nuevas vivencias... ¡Campo libre para los ingeniosos trovadores y para las misteriosas hadahs que juguetean con nosotros un día sí y otro también!
    Esa solitaria neurona tuya, querido An Arco,cunde cantidad.

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  2. Gracias, Gelovira; gracias, Gata Madre.

    Tus palabras suavizan mi desorden neuronal y sosiegan mis inquietudes anárquicas y revolucionarias.

    Me alegro de que te guste el diseño (no es mío, claro).

    Efectivamente estoy de acuerdo contigo en que el negro le da elegancia pero también le quita claridad a la lectura. Busqué y busqué para encontrar algo mejor y no lo hallé, así que preferí asociar la nocturnidad con los gatos y el color pardo de su sonambulismo y de ese modo facilitaros la tarea de hacer conmigo la revolución.

    Enfriado el verbo que se me inflamó como una mala infección o una muy buena erección, quiero decir que sigo pensando en los alumnos como verdaderos motores del blog, pero no veo que este año estemos teniendo suerte con ellos y su participación.

    Me comentaba nuestro Ex el otro día mientras tomábamos unas cervecitas y conversábamos que sería interesante pedirles a los alumnos que nos proveyeran de postales de sus ciudades o de lugares que les gusten y los acompañaran de breves textos con que situarlos en el mapa y con que venerar la motivación de dicha selección. Me pareció bien y se lo he transmitido a los míos.

    Espero que hagáis vosotras lo mismo y así, aunque sea poquito, encontraremos algún modo de que participen en este blog, que surgió para ayudarlos y que ha servido como remedio barato para evitarnos la visita al psiquiatra (en el peor de los casos) o al psicólogo (en el mejor).
    En mi caso, creo que nada ni nadie me van a evitar la visita al geriatra.

    Saludos cordiales

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