Me miro las manos una y otra vez....están ensangrentadas y mi piel parece que tenga la lepra, me faltan 5 ó 6 uñas, me siento como continuamente embotada, aturdida, víctima de una gripe extraña y mortal.
Pero no es eso,...la verdad es que soy una maldita z... no, no quiero ni pensarlo, aunque no me sienta viva, no lo diré.
Llevo deambulando, no sé cuantos días, o meses, el tiempo no significa nada. Me
limito a andar sin rumbo arrastrando una de mis piernas,que por el ángulo,que forma con el suelo debe estar rota, pero no siento dolor, sólo sed,una terrible sed,que me asusta(me parece que ése era el sentimiento), pero no de agua,no, sino de (me sorprendo de nuevo al soñarlo?) sangre,roja y espesa, dulce y sabrosa y aunque ya no recuerdo que era la saliva, aumento un poco mi ritmo errático.
Intento una y otra vez mantener mis brazos abajo, pero la inercia me empuja a mantenerlos delante de mí, como en las malas películas de muertos vivientes, quizá mi cuerpo intente equilibrarse por su cuenta. A veces mi visión aún se hace más confusa de lo habitual, (mis párpados ya no funcionan) como si tuviera muchos ojos y todos fueran móviles y entonces tengo que parar y coger uno de ellos y a la fuerza introducirlo de nuevo en su sitio.
No hay dolor, ni miedo, ni necesidad de dormir...sólo sed ...y noto como si hiciera una eternidad que no he bebido.
Sigo adelante, ignorando a los que, como yo, buscan a mi lado.
Todo es rojo (rojo?), rojo y negro a mi alrededor...
Olena Karpenko
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