jueves, 25 de abril de 2013

Qingqing W.

(Enlace al artículo de El Día)
¿Podemos vivir sin mentir? Comparto la opinión del experto de que es imposible vivir sin mentir. Esta mañana, yo misma he mentido a mi familia para evitar un problema que nos ha causado la comunidad. He pagado una pequeña cantidad de dinero que corresponde a la comunidad.
Por cierto, personalmente odio mentir. Mentir para engañar, para conseguir el supuesto benificio, causa daños, todas las mentiras con malas intenciones. Desgraciadamente, vivimos en un mundo demasiado hipócrita. Los políticos mienten al afirmar que " no tenemos crisis", "no subimos el IVA"; Los bancos mienten: te ponen unas condiciones para tu hipoteca, sabiendo que nunca leerás la letra pequeña, por eso, existen cláusulas abusivas. Las empresas engañan, cuando solicitas una tarifa plana de tu móvil, te explican amablemente las grandes y claras letras al lado de la tarifa, letras que puedes leer tú perfectamente, pero nunca te avisa de que hay otras condiciones apatadas en contraportada, que tú no puedes relacionar con la tarifa que eliges.
¿Es necesario tanta falsedad? En mi opinión, no. Si los políticos no mintieran, ganarían más confianza de los ciudadanos. Los bancos, de no haber hecho unas tasaciones mucho más elevadas que las reales, posiblemente, no habrían provocado tantos desahucios........
Sin embargo, animamos a un enfermo diciendole que no está grave, que los médicos son muy buenos, que los aparatos están muy avanzados, aunque sabíamos que está a punto de morir. No decimos la verdad a nuestros amigos para consolarles, para que no sufran. Los hijos ocutan la verdad a sus padres para que no se preocupen. Muchas veces se trada de mentiras con buena fe. Yo también lo halgo.
Ya que sabemos que no podemos evitar mentir. ¡Ojalá nuestras mentiras sean mentiras piadosas y que no causen daños a nadie.

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